/ martes 19 de julio de 2022

Coyuntura por una participación ciudadana

Hemos venido comentado, durante varias semanas de la probable e inédita coyuntura democrática que se pueda presentar en nuestro partido mediante la cual se ha convocado a la participación libre y abierta a las y los ciudadanos de a píe en el proceso de renovación de los órganos de decisión, dirección y ejecución partidista.

Al cierre de los registros para postulación a congresistas a las 23:59 horas del viernes 15 julio, se reconocían en una relación preliminar de un aproximado de sesenta mil personas que dejaron de manifiesto su deseo de participar en las próximas asambleas de los 300 distritos federales electorales que se llevarán a cabo los días 30 y 31 de julio.

Con la participación de un aproximado de 200 personas en promedio (indistintamente hombres y mujeres), de los distritos en los que se han postulado para congresistas, habla bien y muy bien de una posibilidad de ciudadanizar al partido.

La incuestionable crisis que padecemos los partidos políticos en México, requiere replantear sus formas, mecanismos o procedimientos de renovar y/o elegir a sus representantes populares. Se tendrá que pensar en procesos abiertos, libres, públicos e incluyentes.

Indistintamente todas las organizaciones políticas debemos observar el estado de derecho que rige a nuestras instituciones en materia electoral, para evitar vicios y prácticas antidemocráticas del pasado.

Aguascalientes y seguramente la mayoría de los estados de la república cuentan con un escenario más esperanzador dada la apertura con la que se ha convocado a la participación de las y los ciudadanos mexicanos en el proceso interno de renovación de los órganos del partido.

En nuestra entidad, se registraron poco más de cuatrocientas personas que se han postulado para congresistas en tres distritos federales electorales (en promedio más de 130 postulantes a congresistas por distrito), incluso nuestras cifras superan a Zacatecas, no obstante que ésta cuenta con cuatro distritos federales electorales.

El que nuestro proceso de renovación sea abierto y libre, genera altas probabilidades de que una mayoría de registros sea de ciudadanos que han seguido la lógica de ciudadanos libres, es decir, sin relación de obediencia a grupos, corrientes o camarillas identificadas en la localidad.

Las sociedades actuales demandan procesos de renovación transparentes, abiertos, libres y democráticos. Los partidos políticos debemos estar a la altura de las circunstancias previstas en la legislación electoral de "garantizar la participación del pueblo en la vida democrática".

En ese orden de ideas, los fundamentos estatutarios de nuestro partido, declaran la constitución a partir de "afiliaciones individuales, personales, libres, pacíficas y voluntarias; por ningún motivo se deben permitir facciones, corrientes o grupos que vulneren la soberanía del partido".

Como lo refieren los documentos básicos (declaración de principios, programas y estatuto), “MORENA, es una organización plural, amplia e incluyente que convoca al pueblo de México…”, en relación a éstos, la propia CPEUM y la Ley General de Partido Políticos prevén como fin de los partidos políticos la participación del pueblo en la vida democrática.

Morena se encuentra en altas probabilidades de sentar bases para democratizar los procesos internos para elegir, incluso, sortear los órganos de representación política y organizarse para hacer posible el acceso al ejercicio del poder público, si actúa a través de métodos y herramientas que garanticen estabilidad política.

Es muy probable -depende de la voluntad política de las nuevas dirigencias- que, el ejercicio con el que se convoca a participar libre y abierta a las y los ciudadanos en la renovación de los órganos del partido, se trate del inicio de una nueva etapa en pro de la democratización de nuestra organización.

Hipotética y lo más democráticamente deseable es que el ejercicio que estaremos realizando los últimos días del mes, sea el inicio de nuevas formas, métodos o procedimientos democráticos que habrán de reconocer y garantizar igualdad política de participación de la ciudadanía en procesos internos del partido.

La literatura en regímenes democráticos sugiere que “El uso de la suerte para la designación… es una institución democrática. El principio de la elección, por el contrario, es oligárquico” en opinión de Aristóteles “lo realmente democrático era la suerte, el sorteo” las elecciones por sorteo, en la antigua Atenas tenían como objetivo neutralizar la influencia individual.

Las bases democráticas de la España actual, fue la forma de elección por sorteo lo afirmó Fernando II en 1942 “por experiencia se ve que las ciudades y municipios regidos por insaculación fomentan más la buena vida y una administración y un Gobierno saneados que los regímenes basados en elección. Están más cohesionados y son más igualitarios, más pacíficos y están más desapegados de sus pasiones”.

Indudablemente, la participación ciudadana libre, abierta y genuina, es una forma más de ciudadanizar.

Hemos venido comentado, durante varias semanas de la probable e inédita coyuntura democrática que se pueda presentar en nuestro partido mediante la cual se ha convocado a la participación libre y abierta a las y los ciudadanos de a píe en el proceso de renovación de los órganos de decisión, dirección y ejecución partidista.

Al cierre de los registros para postulación a congresistas a las 23:59 horas del viernes 15 julio, se reconocían en una relación preliminar de un aproximado de sesenta mil personas que dejaron de manifiesto su deseo de participar en las próximas asambleas de los 300 distritos federales electorales que se llevarán a cabo los días 30 y 31 de julio.

Con la participación de un aproximado de 200 personas en promedio (indistintamente hombres y mujeres), de los distritos en los que se han postulado para congresistas, habla bien y muy bien de una posibilidad de ciudadanizar al partido.

La incuestionable crisis que padecemos los partidos políticos en México, requiere replantear sus formas, mecanismos o procedimientos de renovar y/o elegir a sus representantes populares. Se tendrá que pensar en procesos abiertos, libres, públicos e incluyentes.

Indistintamente todas las organizaciones políticas debemos observar el estado de derecho que rige a nuestras instituciones en materia electoral, para evitar vicios y prácticas antidemocráticas del pasado.

Aguascalientes y seguramente la mayoría de los estados de la república cuentan con un escenario más esperanzador dada la apertura con la que se ha convocado a la participación de las y los ciudadanos mexicanos en el proceso interno de renovación de los órganos del partido.

En nuestra entidad, se registraron poco más de cuatrocientas personas que se han postulado para congresistas en tres distritos federales electorales (en promedio más de 130 postulantes a congresistas por distrito), incluso nuestras cifras superan a Zacatecas, no obstante que ésta cuenta con cuatro distritos federales electorales.

El que nuestro proceso de renovación sea abierto y libre, genera altas probabilidades de que una mayoría de registros sea de ciudadanos que han seguido la lógica de ciudadanos libres, es decir, sin relación de obediencia a grupos, corrientes o camarillas identificadas en la localidad.

Las sociedades actuales demandan procesos de renovación transparentes, abiertos, libres y democráticos. Los partidos políticos debemos estar a la altura de las circunstancias previstas en la legislación electoral de "garantizar la participación del pueblo en la vida democrática".

En ese orden de ideas, los fundamentos estatutarios de nuestro partido, declaran la constitución a partir de "afiliaciones individuales, personales, libres, pacíficas y voluntarias; por ningún motivo se deben permitir facciones, corrientes o grupos que vulneren la soberanía del partido".

Como lo refieren los documentos básicos (declaración de principios, programas y estatuto), “MORENA, es una organización plural, amplia e incluyente que convoca al pueblo de México…”, en relación a éstos, la propia CPEUM y la Ley General de Partido Políticos prevén como fin de los partidos políticos la participación del pueblo en la vida democrática.

Morena se encuentra en altas probabilidades de sentar bases para democratizar los procesos internos para elegir, incluso, sortear los órganos de representación política y organizarse para hacer posible el acceso al ejercicio del poder público, si actúa a través de métodos y herramientas que garanticen estabilidad política.

Es muy probable -depende de la voluntad política de las nuevas dirigencias- que, el ejercicio con el que se convoca a participar libre y abierta a las y los ciudadanos en la renovación de los órganos del partido, se trate del inicio de una nueva etapa en pro de la democratización de nuestra organización.

Hipotética y lo más democráticamente deseable es que el ejercicio que estaremos realizando los últimos días del mes, sea el inicio de nuevas formas, métodos o procedimientos democráticos que habrán de reconocer y garantizar igualdad política de participación de la ciudadanía en procesos internos del partido.

La literatura en regímenes democráticos sugiere que “El uso de la suerte para la designación… es una institución democrática. El principio de la elección, por el contrario, es oligárquico” en opinión de Aristóteles “lo realmente democrático era la suerte, el sorteo” las elecciones por sorteo, en la antigua Atenas tenían como objetivo neutralizar la influencia individual.

Las bases democráticas de la España actual, fue la forma de elección por sorteo lo afirmó Fernando II en 1942 “por experiencia se ve que las ciudades y municipios regidos por insaculación fomentan más la buena vida y una administración y un Gobierno saneados que los regímenes basados en elección. Están más cohesionados y son más igualitarios, más pacíficos y están más desapegados de sus pasiones”.

Indudablemente, la participación ciudadana libre, abierta y genuina, es una forma más de ciudadanizar.