/ sábado 11 de agosto de 2018

¿Amigos o Enemigos?


¿AMIGOS o ENEMIGOS?

Por: Gloria Margarita Romo Báez

De las propuestas a las realidades hay mucha distancia, no es lo mismo decir lo que otros quieren escuchar, que decir lo que realmente piensas. Mi sabia abuela, cuando le pedía algún consejo, siempre me decía que la gente tiene tenemos 3 pensamientos a un mismo tiempo.

Lo que dices, lo que piensas y lo que vas hacer. También solía decir que, para evitar conflictos con las personas, debías decirles que sí a algo con lo que nos estabas de acuerdo y hacer lo que tu querías hacer. Algunos llamarían esto “hipocrecia”, otros le dirían “mentira”, muchos te dirán “astuto”, “inteligente”, manipulador, “habilidoso”, “maquiavélico” y muchas más cosas.

Pues esto último es lo que está pasando con el Presidente Electo, hoy vemos a un AMLO diametralmente opuesto a lo que nos mostro en el proceso electoral. Antes atacaba a sus opositores políticos, ahora los llama honestos, inteligentes y buenos hombres.

Antes se defendía de sus detractores, les llamaba corruptos, nefastos, ignorantes, la mafia del poder y muchas cosas más. Ahora ya se reúne con ellos, se toma fotos, sonríe con ellos y acuerda con ellos. No digo que este cambio de actitud sea malo, al contrario, me parece sensato y razonable.

Ya que acabaron las campañas y ahora que ya es Presidente Electo, es muy conveniente para el país que los principales actores de la política nacional se dediquen a construir acuerdos que faciliten el cambio de poderes y aclaren la perspectiva de México.

Las dos reuniones que han sostenido el Presidente saliente con el Presidente entrante y los acuerdos que han logrado son una buena señal de entendimiento y reconciliación. Tal vez podamos pensar que también han pactado algunos acuerdos en lo obscurito, como suele suceder en todo ámbito político.

Hay quienes suponen que la buena disposición del Presidente Peña Nieto para lograr un cambio de estafeta de manera ordenada y transparente, son el pago a la impunidad que le ha ofrecido AMLO; otros opinan que Peña Nieto es un caballero de la política y que esta mostrando una alta responsabilidad hacia su país.

Ofrecerle a AMLO entregar una iniciativa de Ley para la reaparición de la Secretaría de Seguridad Pública que el mismo Peña Nieto desapareció, suena a broma, sin embargo, es cierto. Ofrecerle participar en la elaboración de la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos es una buena señal. De ser enemigos, nunca hubiéramos visto esto. Pero como al parecer ya son amigos, estamos atestiguando este inédito hecho.

Yo me inclino en creer que ambos están de acuerdo en beneficiar a México y dejar a un lado sus diferencias e inclinaciones políticas, quiero pensar que el destino de la Nación es más relevante que sus propios intereses y como cada cambio de poder, todos esperamos que ahora si el nuevo gobierno haga lo necesario para mejorar las condiciones de vida y aspiraciones de todos los que habitamos este país, ojalá y así sea.


¿AMIGOS o ENEMIGOS?

Por: Gloria Margarita Romo Báez

De las propuestas a las realidades hay mucha distancia, no es lo mismo decir lo que otros quieren escuchar, que decir lo que realmente piensas. Mi sabia abuela, cuando le pedía algún consejo, siempre me decía que la gente tiene tenemos 3 pensamientos a un mismo tiempo.

Lo que dices, lo que piensas y lo que vas hacer. También solía decir que, para evitar conflictos con las personas, debías decirles que sí a algo con lo que nos estabas de acuerdo y hacer lo que tu querías hacer. Algunos llamarían esto “hipocrecia”, otros le dirían “mentira”, muchos te dirán “astuto”, “inteligente”, manipulador, “habilidoso”, “maquiavélico” y muchas más cosas.

Pues esto último es lo que está pasando con el Presidente Electo, hoy vemos a un AMLO diametralmente opuesto a lo que nos mostro en el proceso electoral. Antes atacaba a sus opositores políticos, ahora los llama honestos, inteligentes y buenos hombres.

Antes se defendía de sus detractores, les llamaba corruptos, nefastos, ignorantes, la mafia del poder y muchas cosas más. Ahora ya se reúne con ellos, se toma fotos, sonríe con ellos y acuerda con ellos. No digo que este cambio de actitud sea malo, al contrario, me parece sensato y razonable.

Ya que acabaron las campañas y ahora que ya es Presidente Electo, es muy conveniente para el país que los principales actores de la política nacional se dediquen a construir acuerdos que faciliten el cambio de poderes y aclaren la perspectiva de México.

Las dos reuniones que han sostenido el Presidente saliente con el Presidente entrante y los acuerdos que han logrado son una buena señal de entendimiento y reconciliación. Tal vez podamos pensar que también han pactado algunos acuerdos en lo obscurito, como suele suceder en todo ámbito político.

Hay quienes suponen que la buena disposición del Presidente Peña Nieto para lograr un cambio de estafeta de manera ordenada y transparente, son el pago a la impunidad que le ha ofrecido AMLO; otros opinan que Peña Nieto es un caballero de la política y que esta mostrando una alta responsabilidad hacia su país.

Ofrecerle a AMLO entregar una iniciativa de Ley para la reaparición de la Secretaría de Seguridad Pública que el mismo Peña Nieto desapareció, suena a broma, sin embargo, es cierto. Ofrecerle participar en la elaboración de la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos es una buena señal. De ser enemigos, nunca hubiéramos visto esto. Pero como al parecer ya son amigos, estamos atestiguando este inédito hecho.

Yo me inclino en creer que ambos están de acuerdo en beneficiar a México y dejar a un lado sus diferencias e inclinaciones políticas, quiero pensar que el destino de la Nación es más relevante que sus propios intereses y como cada cambio de poder, todos esperamos que ahora si el nuevo gobierno haga lo necesario para mejorar las condiciones de vida y aspiraciones de todos los que habitamos este país, ojalá y así sea.

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