Uno de los dos cuerpos que fueron encontrados calcinados dentro de un auto que se accidentó el martes por la tarde al sur de la ciudad de Aguascalientes, fue extraoficialmente identificado como Julio César, de 18 años de edad, quien probablemente es originario del estado de Michoacán, mismo que podría ser la persona que conducía el coche accidentado, ya que acudió quien dijo ser su padre al Ministerio Público para acreditar la propiedad de un coche que coincide con el que terminó consumido por las llamas.
De acuerdo con esta información, que no ha sido confirmada por la Fiscalía General del Estado (FGE), el ahora fallecido vivía en un domicilio de la calle Luis Moya, en el fraccionamiento Jesús Terán, y aparentemente, tanto Julio César, como la otra persona que lo acompañaba, regresaban de una comida campestre cuando ocurrió el mortal percance a bordo de un Peugeot 207, en color rojo, con placas del Estado de México.
Se sabe también de forma extraoficial que la familia del muchacho se dedica a la compraventa de vehículos y que tienen menos de un año de radicar en la ciudad de Aguascalientes.
Sin embargo, dicha información se podrá corroborar hasta que se cotejen las muestras de ADN, estudio que estará listo hasta dentro de 72 horas. Por su parte, de la otra víctima no se sabe más que era amigo de Julio César.
El horrendo accidente vial se registró alrededor de las 18:23 horas del martes en la carretera estatal número 2, a la altura del rancho La Providencia, donde el Peugeot colisionó contra un objeto fijo para posteriormente volcarse y terminar envuelto en llamas con el conductor y un pasajero al interior, quienes murieron espantosamente.
IRRECONOCIBLES
Se sabe que los cadáveres presentan quemaduras entre 98% y 97% de la superficie corporal y la FGE informó que de acuerdo a sus características, se trata de dos varones.
