A pesar de los muchos retos que tenemos por delante, la llegada de un nuevo año siempre debe ser un aliciente para retomar fuerzas, renovar el espíritu y dar siempre lo mejor de nosotros.
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Los propósitos que, en público o privado, hace mucha gente al comienzo de cada ciclo, son una forma de mirar con ilusión y optimismo el futuro inmediato, de pensar que, cada día, durante los próximos doce meses, haremos nuestro mayor esfuerzo para cumplir con esas promesas que nos hacemos, considera el obispo José María de la Torre Martín.
Hay un dicho que se dice con frecuencia: ‘año nuevo, vida nueva’. Es muy cierto, mucha gente tendrá propósitos para el año que comienza, ello es una forma de mirar con ilusión y optimismo el futuro. Les ofrecemos un propósito para el 2020, leer la Biblia un poquito cada día, siguiendo el Evangelio que se proclama
El líder de la Iglesia católica en la Diócesis de Aguascalientes, reconoce que no es casual que, previo al arranque de un nuevo ciclo civil, se celebre la Navidad, pues la conmemoración de la llegada del hijo de Dios a la tierra, es la encarnación más clara de la promesa de un mundo y una vida mejores.
Dice el papa que con Jesús ha vida, luz y esperanza. Los cristianos no podemos sino dar mensajes de vida, luz y esperanza. Debemos ver el nuevo año con alegría a pesar de nuestras tristezas, y a la vez comprometernos a que haya más luz, más esperanza y más vida para aquellos casi no las tienen.
José María de la Torre Martín, Obispo de Aguascalientes
*Encuentra el detalle de esta información en la edición de EL SOL DEL CENTRO de mañana jueves