Desde hace varios años se han adoptado otras formas para pasar las fechas decembrinas en familia, situación que se atribuye a los cambios generacionales.
Tiempo atrás, familias enteras se reunían para convivir y pasar una Nochebuena en compañía de sus seres queridos, además, en el aire se percibía un ambiente de armonía y felicidad, generado por la Navidad.
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Se dice que con anterioridad las calles se cerraban para mayor gozo y seguridad de los miembros de familia que seguían las tradiciones, como el pedir posada, romper piñatas, entre otras costumbres.
Adultos mayores opinan que la pérdida de lo tradicional se debe a los cambios generacionales y avances tecnológicos, ya que los dispositivos móviles se han convertido en una distracción, además de que los jóvenes prefieren pasar tiempo con sus amistades.
En la actualidad, las familias se reúnen para “cumplir” con el compromiso de hacer una visita de cortesía, convivir por un tiempo corto, cenar, llevar a cabo la entrega de obsequios y después retirarse para pasar el resto de la noche con amistades o, en el peor de los casos, ir a descansar por la apatía que la temporada genera en algunas personas.
EL DATO...
Las tradiciones se han perdido por completo, la ilusión navideña sólo la mantienen los menores de 10 años.
