El proyecto energético propuesto por Andrés Manuel López Obrador, busca que los mexicanos contemos con combustibles baratos y evitar que Pemex sea desmantelada y vendida a precios de remate.
No es posible que en nuestro país, siendo productor de petróleo tengamos que exportar la gasolina o que les enviemos el crudo para que reimportarlo como gasolina, eso es absurdoMiguel Bess-Oberto Díaz, Ideólogo del PT
El expresidente estatal del Partido del Trabajo (PT), Miguel Bess-Oberto Díaz, condenó que en el transcurso de los últimos años se haya vendido a los mexicanos la idea de que somos incapaces de producir nuestros propios combustibles y debemos adquirirlos en el extranjero.
Durante un diálogo con el vicepresidente Ejecutivo de la Organización Editorial Mexicana (OEM), Francisco Torres Vázquez y los directores editoriales de los 60 periódicos de esta organización, el candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer que construirá dos nuevas refinerías y rehabilitará las seis que existen y que operan a su mínima capacidad.
Para el también ideólogo del PT en Aguascalientes, esta postura de López Obrador tiene como fondo el detener el desmantelamiento de la industria petrolera nacional y su remate a precios irrisorios, tal como sucedió en su comento con Telmex y con Ferronales.
“No es posible que en nuestro país, siendo productor de petróleo tengamos que exportar la gasolina o que les enviemos el crudo para que reimportarlo como gasolina, eso es absurdo”, refirió.
La propuesta de López Obrador, estableció Bess-Oberto Díaz, es bastante lógica y perfectamente viable, a pesar de que la ciudadanía cree de manera errónea que no hay nada más que hacer por la industria petrolera nacional.
“Es cierto que seis años son muy pocos para un proyecto de esta envergadura, pero también sabemos que Andrés Manuel no habla sin tener las bases. A lo mejor mucha gente no lo conoce como gobernante, pero hay que revisar su ejercicio al frente del Distrito Federal, donde demostró que puede hacer las cosas bien”, hizo notar.
El petista consideró que López Obrador se ha mostrado cauteloso al no proponer la desaparición inmediata de la Reforma Energética, sin embargo tiene su mira puesta en los grandes males que derivaron de ella como el fuerte incremento a los combustibles, el cual sí atacará de raíz al retomarse la producción local.