La semana pasada terminé de leer la obra “El corazón de las tinieblas” de Joseph Conrad en una versión de novela gráfica adaptada por Peter Kuper y traducida por Esther Villardón en una edición de la colección Popular Novela Gráfica del Fondo de Cultura Económica (FCE). Es un libro totalmente recomendable.
Esta novela es un retrato crudo del África de finales del siglo XIX y comienzos del XX en la región del Congo, con la explotación colonialista y el abuso de los poderosos contra los pobladores de esa región a través de imágenes y diálogos ágiles y que invitan a la reflexión sobre el tema en esta obra clásica de Conrad.
En esta edición realizada por FCE conjuntamente con la editorial Sexto Piso nos da muestra del acertado trabajo que se realiza a través de la colección Popular Novela Gráfica para acercar los libros a los lectores con precios accesibles y a su vez ampliar, como se ha hecho nuestro gobierno de la Cuarta Transformación, el catálogo del Fondo de Cultura con propuestas como la colección Vientos del Pueblo y la de novelas gráficas.
Muchos lo saben, me encantan las novelas gráficas y el cómic como una manera de expresión artística. Desde los legendarios ejemplares de la colección Clásicos Ilustrados y Clásicos Infantiles editados de manera masiva por La Prensa en la década de los setenta en México, los libros e historietas de personajes entrañables de mi infancia como Mafalda, Mortadelo, Ásterix, los libros de Rius, entre otros muchos, pasando a la efímera revista “Bronca” de la década de los ochenta donde descubrí a Hugo Pratt, luego en la década de losa noventa con las novelas gráficas editadas por Vid pertenecientes a DC, Marvel y Dark Horse en las que gracias a ellas leímos “La muerte de Superman”, “La caída del murciélago” e incluso “Sin City” de Frank Miller, son algunas de las lecturas de este género que va de la tira cómica, la historieta, el libro gráfico y la novela gráfica como opciones en las que se mezclan las imágenes con la comunicación escrita que es algo que me gusta tanto.
Como lo escribí en su momento en esta columna, en nuestra Cuarta Transformación y bajo la dirección de Paco Ignacio Taibo II el FCE ha tenido cambios muy positivos acercando libros a bajo costo para sus lectores y ampliando el catálogo a muchas posibilidades, una de ellas es con la colección Popular Novela Gráfica.
Desde la creación de esta colección he leído varias de las obras y algunas son oportunidades irrepetibles de conocer a autores usualmente difíciles de conseguir, tal es el caso por supuesto del italiano Hugo Pratt con la serie “Los escorpiones del desierto” dividida en tres volúmenes. Pratt con su inigualable estilo de aventuras con personajes como Corto Maltés, Sargento Kirk y Ernie Piken, ahora nos comparte la odisea en Libia y Egipto del capitán polaco Köinsky durante la Segunda Guerra Mundial, es sencillamente imperdible.
En esta colección también está “Los años de Allende” de los chilenos Carlos Reyes y Rodrigo Elgueta en el que se relata el golpe militar de Augusto Pinochet en Chile desde la mirada de un periodista logrando retratar el clima social de ese país en esos días.
Con “Hot L.A.” del argentino Horacio Altuna, su autor con un estilo ágil y una interesante propuesta gráfica nos narra las peleas y clima social de las pandillas en los Estados Unidos en el marco de las duras y violentas protestas raciales afroestadounidenses en 1992 originadas por el arresto a Rodney King en las que hubo un saldo de 63 muertos, 2 mil heridos, 7 mil incendios y daños a 3 mil 100 establecimientos. Leer esta obra nos da la oportunidad de revisar el fenómeno del racismo y sus consecuencias ante un gobierno opresor.
Obras como “Junius Maltby y las praderas del cielo”, una versión libre del capítulo VI de “Las praderas del cielo” de John Steinbeck realizada por Ricardo Peláez es una nueva mirada a la adaptación de una obra literaria a la novela gráfica con dibujos y escenas conmovedoras.
En la breve obra “Huracán. El guardián del mercurio” de Ricard Castels nos ofrece una intensa y bella propuesta visual sobre una tragedia marítima a comienzos del siglo XVIII siendo una adaptación de la novela Huracán de Carlos León Amores.
Otro imperdible es el libro “Las falanges del Orden Negro” de Enki Bilal y Pierre Christin en la que un grupo de viejos excombatientes republicanos españoles luchan contra otros veteranos terroristas de extrema derecha.
Una historia fantástica y casi onírica es la de “El lento andar de la araña” de Pepeto quien logra una atmósfera verosímil a esa narración.
Del catálogo actual me restan por leer “Ficcionario” de Horacio Altuna, “Kraken” de Antonio Segura y “El hombre de Pskov” de Guido Crepax. Una buena manera de iniciar el año es explorar nuevas formas de abordar la literatura con buenos autores, recomiendo exploren esta nueva colección del FCE.
