El ejercicio legislativo del Congreso de la Unión a partir del próximo 1 de septiembre será complicado, ante la conformación de las cámaras Alta y Baja, lo que no deberá ser obstáculo para que se anteponga el interés de Aguascalientes y la obtención de mayores recursos para esta entidad.
Tras manifestar lo anterior, Sylvia Garfias Cedillo, diputada federal electa, refirió que ante un futuro incierto como el que se cierne sobre el país, se deberá trabajar el doble para que el país no se vaya a pique ante las ocurrencias de quien será el jefe del Ejecutivo Federal.
La legisladora federal electa advirtió de igual forma que deberá de lucharse contra el alto grado de desconocimiento de los integrantes de la bancada de Morena, quienes no tienen el menor conocimiento de las técnicas legislativas o siquiera de cómo se encuentra la división de poderes en el país.
Condenó que senadores y diputados emanados de Morena pretendan recibir “instrucciones” del jefe del Ejecutivo, lo que pone en peligro al país de quedarse sin contrapesos efectivos que permitan la gobernabilidad.
De igual manera, Garfias Cedillo advirtió que ya desde ahora el Ejecutivo Federal ha dado muestras de pretender imponer su voluntad aún en contra de la propia Constitución General de la República, situación que pone en peligro el correcto rumbo del país.
No hay un futuro muy certero, sobre todo ante las ocurrencias que ha mostrado el Presidente electo. Nadie le ha dicho que para que se lleve a cabo una consulta popular sobre el nuevo aeropuerto, se marca en el Artículo 35 Constitucional, que la pregunta que será consultada tiene que estar aprobada por la SCJN, la debe realizar el INE y que tendrá que ser concurrente con una elección federal. Sylvia Garfias Cedillo
Garfias Cedillo refirió que, de acuerdo a la ley existente, la consulta sobre la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México deberá ser en 2021 y no en los próximos meses como se pretende.
Advirtió finalmente que, con el recurso destinado al anunciado proyecto del Tren Maya, se podrían instalar celdas solares en 25 millones de hogares, con lo que las familias pagarían entre 20 y 40 pesos de energía eléctrica al mes.
