No paran los traslados de vehículos clausurados, que con una grúa viajan a la pensión municipal de la feria, y es que parece ser que la ciudadanía no ha logrado entender, sobre el respeto y educación vial.
Son alrededor de mil autos, los que han sido remitidos a la pensión municipal, tras operativos por parte de la Dirección de Vialidad y Movilidad en el perímetro ferial.
Las causas primordiales de la mayoría, son por estar estacionados en lugares no permitidos como son: línea amarilla, línea roja, rampas para personas con discapacidad o doble fila.
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Así lo dio a conocer el encargado del área, Arturo Martínez Morales, quien dijo que estas situaciones en su mayoría se presentan en las calles, Laureles, Pedro de Alba, J Correa y F Elizondo.
Especificó que la infracción por estacionarse en línea amarilla, que vendría a ser la falta menos grave, el costo oscila entre los $311 a los 350 pesos, mientras que la de por obstruir espacios para personas con capacidades diferentes está entre los $1,659 a $2,074.
El año pasado, tuvieron en la pensión municipal instalada de manera cercana al perímetro ferial, siendo más prácticos para el traslado de los vehículos removidos, y sobre todo, agilizando la localización, por parte de los propietarios y la pronta respuesta, un total de 1131 autos al finalizar la verbena.
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El domicilio común de la pensión municipal, es Prolongación Avenida Héroe Inmortal kilómetro 3.5, pero para feria, por la misma distancia, habilitan un terreno, para destinar ahí los vehículos, propiedad de infractores.
Sobre la inconformidad de los ciudadanos que al momento de regresar por sus coches, ya no los localizan, ha habido quienes aseguran que esta acción de parte de las autoridades es ilegal, Martínez Morales por su parte, resaltó que la ley no se incumple al retirar los vehículos infractores.
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