Al menos tres de cada diez viviendas de los municipios del norte y nororiente del estado se encuentran en serie riesgo de venirse abajo ante las intensas lluvias que se han registrado en la entidad.

La diputada local por el Distrito 04, Josefina Moreno Pérez, refirió que si bien las construcciones de adobe han sido paulatinamente sustituidas por otras con materiales más firmes, aún existen gran cantidad de viviendas que han comenzado a presentar reblandecimientos debido a las fuertes precipitaciones pluviales de los últimos días.

Hay muchas construcciones de adobe que son muy viejas y con la lluvia comienzan a remojarse las bardas. Son fincas que no tienen tanto soporte y comienzan a derrumbarse y deslavarse

Moreno Pérez, reconoció que al momento las áreas de protección civil han iniciado con recorridos de supervisión en todos los municipios, sin embargo al detectar algún riesgo se limitan a tomar nota, sin llevar a cabo ninguna clase de acción.

Más de 30% de las casas de los municipios del interior son de adobe. Con el paso de las décadas los habitantes de esta zona del estado se han de dedicado a renovar sus casas, a sustituirlas con ladrillo o materiales más resistentes, pero el peligro se encuentra latenteUrgió tanto al gobierno del estado como a los ayuntamientos del interior para que pongan en marcha programas emergentes de supervisión de riesgo, así como de créditos para la construcción o reparación de las viviendas que están en peligro.

En este mismo sentido, la legisladora priísta aseguró finalmente que, pese al riesgo que representan, las lluvias han sido más benéficas que perjudiciales, pues han dado a la tierra la humedad suficiente para dar buenas esperanzas en la cosecha de temporal que se encuentra en proceso.