La mexicana alegría que se vive durante el presente mes, no debe ser pretexto para caer en excesos en el consumo de alcohol y fiestas desenfrenadas que en ocasiones terminan en tragedia, al conducirse automóviles en estado de embriaguez.
Felipe Gutiérrez Rosales, vocero de la Diócesis de Aguascalientes, hizo un llamado a ser prudentes en el consumo de bebidas embriagantes, pues la diversión no es mayor cuando se embriagan.
En el marco de la conferencia de prensa que semanalmente ofrece en la sede del Obispado, reconoce que el número de sitios que venden alcohol en la ciudad puede o no exagerado, pero sí corresponde a cada persona el tomar conciencia de su propia responsabilidad.
Hay mucho alcoholismo, siempre se ha dicho que uno de los grandes problemas sociales de Aguascalientes es la bebida y a veces a edades tempranas, no solamente de jóvenes varones, sino también de mujeres.Felipe Gutiérrez Rosales, Vocero de la Diócesis de Aguascalientes
De la misma manera, recordó que la venta de cohetes y pólvora está prohibida, así como el quemarla en la vía pública y sin vigilancia, ante lo cual durante esta temporada debe cuidarse que, especialmente los niños y menores de edad no tengan acceso a cohetes y cohetones que se venden de manera clandestina en las calles.
Pidió que las autoridades en la materia pongan especial atención en aquellos puntos donde saben se comercia con pirotecnia, muchas veces muy potente y que puede salirse de control.
Gutiérrez Rosales explicó que, en el caso de las fiestas patronales y eventos civiles donde se lanzan fuegos pirotécnicos, es necesario solicitar un permiso especial y pasar por revisiones de la Secretaría de la Defensa Nacional y Protección Civil, cuyos elementos incluso controlan la hora de la quema.