Durante esta pandemia, el número de mujeres menores de edad embarazadas se incrementó notablemente ya que mientras en 2019, se atendieron 169 niñas, en 2020, fueron 257 y en lo que va de este año son 94, algunas de ellas de apenas 10 años de edad.
Así lo dio a conocer la directora de la organización Vida y Familia (Vifac) en Aguascalientes, Miriam Altuzar Coello, quien indicó que “gracias a Dios hemos tenido la posibilidad de ayudar a estas jovencitas, de incidir en sus vidas y poder ser un punto de encuentro con ellas mismas y su realidad, para iniciar una transformación paulatina y poder aportar para su vida y maternidad de manera positiva con una atención personalizada”.
El servicio consiste “en una atención médica, capacitación para desarrollar ciertas habilidades, tanto para el trabajo como en el aspecto académico, ya que el aumento del conocimiento nos hace ver un panorama diferente y nos permite tomar mejores decisiones”.
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En el caso de las menores de edad:
La atención ha sido un poco diferente porque la demanda externa ha sido mayor, ya que hasta el momento estamos también apoyando a 126 chicas.
El servicio se está ofreciendo a niñas de 10 años y jovencitas de 19 años:
Lo que significa el 40% de las mujeres atendidas, de 10 a 15 años son el 20%, que en números significa 25 jovencitas y esto es muchísimo.
Altuzar Coello destacó que “se ha registrado un aumento en estas edades, respecto a otros años, antes teníamos la mitad o menos, 10% en las edades mencionadas ya que hoy tenemos el 20% y la verdad es que sí se ha presentado un aumento”.
Por otro lado, “los embarazos han disminuido en las jovencitas de 15 años en adelante, y esto tiene mucho que ver con la deserción escolar, un asunto perfectamente identificado, ya que las jovencitas que están estudiando y que siguen en la escuela, tienen ocho veces menos probabilidad de embarazarse”.
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Argumentó que:
La educación obviamente ayuda a tener una visión diferente y a tomar decisiones distintas, ya que tienen su tiempo ocupado en cuestiones académicas y porque tienen un proyecto de vida y, por tanto, ciertas metas que perseguir.
Indicó además que “todas las mujeres atendidas, todas se han llevado sus bebés, ninguna ha manifestado la posibilidad de entregar a sus hijos en adopción, al menos, no hasta el momento, además que todas las adopciones que se dan por medio de Vifac en toda la República son conscientes, voluntarias y libres, una decisión muy cuidada que requiere la participación de un psicólogo”.
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