Un robo a mano armada en una tienda de abarrotes derivó en una terrible tragedia que arroja como saldo la muerte de un niño de 12 años de edad.
Este terrible hecho se registró al mediodía de ayer en la carretera a Los Arquitos, del municipio conurbado de Jesús María, cuando dos facinerosos llegaron de manera violenta a la tienda denominada “Abarrotes Álvarez”, que era atendida por la señora Juana, de 28 años de edad y su sobrino Irving, de apenas 12 primaveras.
Tras exigirles a gritos y entre maldiciones que les entregaran todo el dinero de que disponían, los delincuentes salieron a toda velocidad con el producto de la venta que hasta esos momentos habían realizado en la tienda.
Presa del coraje y la impotencia porque los desconocidos se llevaron el producto de su trabajo, la señora Juana tomó la determinación de subir a su camioneta Ford Windstar color tinto y salir en su persecución, haciéndose acompañar de su sobrino.
Con la idea fija de detener a los delincuentes, la conductora hundió a fondo el acelerador y darles alcance. Lamentablemente en una de las curvas de la carretera, Juana perdió el control de la unidad y salió del camino.
Al entrar a un desnivel del terreno, la Windstar sólo se detuvo hasta que se estrelló de manera por demás aparatosa contra un frondoso y añejo Eucalipto que se encuentra en el lugar.
Desgraciadamente, el fuerte impacto provocó que Irving perdiera la vida de manera instantánea, en tanto que su tía quedó prensada entre los hierros retorcidos, con heridas de consideración que, sin embargo, no ponen en riesgo su vida.
Al lugar arribaron paramédicos del ISSEA y elementos de bomberos, quienes libraron a la mujer y le brindaron los primeros auxilios, en tanto que por el menor nada pudieron hacer pues éste no presentaba ya signos vitales.
Mientras se realizaban estas labores, los delincuentes se dieron a la fuga sin que nadie prestara atención sobre el rumbo hacia el cual huyeron.
Al lugar arribo el Agente del Ministerio Público adscrito a la Fiscalía General, quien se encargó de dar fe de cadáver, ordenar el levantamiento del mismo y su posterior traslado al Servicio Médico Forense, donde se le practicó la necropsia de ley.
DELINCUENCIA
Mientras se atendía a la mujer herida y se trataba de salvar al menor fallecido, los ladrones causantes de esta tragedia se dieron a la fuga sin que nadie los molestara