El susto de su vida pasó ayer por la tarde impaciente sexagenario, luego de que pretendiera ganarle el paso al tren y lo único que consiguió fue que su camioneta recibiera tremendo impacto en su parte frontal.
Tras el percance que afortunadamente arrojó solamente daños materiales, una vez más quedó de manifiesto que pretender ganar unos minutos al paso del ferrocarril es una de las maneras más tontas que existen de arriesgar la vida.
Los hechos se registraron a las cinco de la tarde en el cruce de las vías del ferrocarril con la calle 28 de agosto, en el Barrio de la Estación, cuando Pablo, de 66 años de edad conducía su camioneta Toyota modelo 2012 con placas de Aguascalientes.
Al llegar al sitio mencionado vio que se acercaba uno de tantos trenes cargueros que todos los días circulan por ese sitio y presionó el acelerador para tratar de pasar antes que la mole de acero.
Afortunadamente algo en su interior lo hizo reaccionar y aplicó a fondo los frenos de su vehículo, alcanzando a detenerse en el umbral de las paralelas, justo a tiempo para que la máquina sólo alcanzara a golpear la parte frontal de la unidad, misma que se desprendió en el acto.
Afortunadamente para Pablo, el fuerte encontronazo lanzó su frágil vagoneta hacia un lado, dejándola fuera del alcance del resto de las góndolas y vagones que arrastraba.
Al arribar los cuerpos de emergencia, verificaron que el conductor de la Toyota se encontraba en perfecto estado de salud y sólo con un susto mayúsculo.
PUNTO PELIGROSO
El cruce de las calles 28 de Agosto con vías del ferrocarril es sitio de constantes percances entre el ferrocarril y automovilistas que intentan ganarle el paso