Un ratero que pretendía apoderarse del cable de cobre que alimentaba un transformador de alta tensión, estuvo a punto de morir en su ilegal intento, al recibir una fuerte descarga eléctrica.
El ladrón, quien dijo llamarse Pablo y contar con 30 años de edad, sintió pasar por su cuerpo, en trayectoria de la mano derecha y hasta la planta del pie, la fuerte corriente eléctrica industrial de 220 voltios, misma que le privó momentáneamente del sentido y del control muscular.
Los hechos se registraron sobre la carretera 45 Norte, antes de llegar al Parque Industrial del Valle de Aguascalientes, donde Pablo pensó que podría hacerse fácilmente del cableado de alimentación del transformador.
Sin ninguna clase de protección y una total ignorancia sobre el comportamiento y propiedades de la electricidad, se acercó hasta el poste, donde con un par de alicates, cortó el alambre y al instante recibió la fuerte descarga.
Afortunadamente para él, trabajadores agrícolas observaron su acción y, a pesar de que pensaron que el hombre había pasado a mejor vida, alertaron a los servicios de emergencia.
Al lugar arribaron policías municipales de Aguascalientes, quienes auxiliaron al ratero en tanto llegaban paramédicos del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA), mismos que luego de una rápida valoración, determinaron trasladarlo al Hospital Miguel Hidalgo, donde quedó internado en calidad de detenido.
Cabe mencionar que personas que se dijeron testigos de los hechos manifestaron haberse percatado que el sujeto llegó al lugar acompañado de otra persona, misma que se dio a la fuga luego de lo sucedido.
EFECTOS
Una descarga de 220 voltios produce en el cuerpo humano pérdida de control de los músculos, contracciones, quemaduras externas e internas y, tras unos segundos, fibrilación del corazón y la muerte.