El exceso de velocidad, combinado con la impericia del chofer de una camioneta repartidora, a punto estuvieron de provocar una tragedia la mañana de ayer, al registrarse la aparatosa volcadura de la unidad, misma que quedó con las llantas al cielo.
Los hechos se registraron en Segundo Anillo, casi esquina con la avenida Barberena Vega, en el fraccionamiento Lomas de Santa Anita, donde quien dijo llamarse César, conducía a velocidad inmoderada y en dirección de norte a sur sobre Segundo Anillo, la camioneta Dodge modelo 2005, con placas de circulación del estado.
Se pudo establecer que al momento de llegar a una curva pronunciada que está en el sitio, César no pudo controlar el vehículo y perdió el control del mismo para irse a proyectar contra un poste de alumbrado público situado sobre el camellón, derribando la luminaria.
Tras el impacto, la unidad motorizada vuelca y queda sobre su toldo, a pesar de lo cual no se detuvo y siguió por unos metros sobre avenida Aguascalientes, hasta que se impactó con el taxi con número económico 1925, que era conducido por Antonio.
Al lugar de los hechos se dieron cita paramédicos del Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA), quienes tras valorar a los involucrados en el percance, determinaron que no requerían ser trasladados a recibir atención médica especializada, al no presentar ningún tipo de lesiones físicas, pero sí un enorme susto.
50,000
Pesos es el cálculo estimado de daños que arrojó este percance.