De sangre caxcana
Ernesto Juárez Frías, hijo de Jesús Juárez y Domitila Frías, nació en Nochistlán, Zacatecas, un 4 de agosto de 1931.
Según comentaba el propio Ernesto Juárez, siempre le gustó la música y el primer instrumento que recibió fue un timbal o tímpano, a los seis años de edad, con el que comenzó a tocar melodías de boga.
Pero fue hasta la década de los 40 que Juárez Frías comenzó a estudiar solfeo, violín y piano, al tiempo que realizaba sus estudios de primaria.
En ese entonces, tocaba el violín en las misas que se celebraban en la parroquia de Nochistlán.
Al concluir la primaria dejó el hogar paterno para ingresar al Seminario Conciliar de Guadalajara, en donde dirigió el coro formado por seminaristas, tenía apenas 11 años de edad.
A los trece años de edad, decidió abandonar el Seminario, pues descubrió que ésa no era su verdadera vocación.
Luego de dejar el Seminario, ingresó a la Academia de Bellas Artes en la ciudad de Aguascalientes, ahí estudió violín y piano, después ingresó a la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Aguascalientes como violín primero.
En 1952, regresó a Zacatecas donde formó el cuarteto Manuel M. Ponce, promoviendo la música de ese compositor.
Según explicaba el propio Ernesto Juárez, en ese tiempo se dedicaba más a la música clásica por gusto.
En 1954, viajó a la Ciudad de México, donde ingresó al Conservatorio Nacional de Música, donde siguió estudiando violín, al mismo tiempo ingresó a la UNAM para cursar la carrera de abogado, de la cual se tituló con la tesis: “La Reprografía en el Derecho de Autor y su Repercusión en Torno al Derecho Internacional”.
Formó parte de la Orquesta de ingeniería, integrada por estudiantes universitarios; en ella participó como violinista, saxofonista y vocalista.
En la XEW
A los veinte años de edad, Ernesto Juárez Frías llegó a la XEW “La voz de América Latina” y comenzó a interpretar sus composiciones, las cuales llamaron la atención de varios intérpretes de la época.
Una de las canciones famosas de ese tiempo fue “Palabras de amor”, interpretada por Hugo Avendaño y Demetrio González.
Fue también cantante con el Mariachi México y el Mariachi Vargas de Tecalitlán.
Sus canciones empezaron a ser reconocidas y a ser grabadas por los mejores cantantes de México, como Lola Beltrán, el “Charro” Avitia, Alberto Vázquez, Lucha Villa, Imelda Miller, Miguel Aceves Mejía, Chabela Vargas, Amalia Mendoza, Sonia López, Johnny Laboriel, Luis Aguilar, Los Babys, Antonio Aguilar, Demetrio González y muchos más.
Asimismo, varias de sus obras han sido temas para películas nacionales como “Juana Gallo”, “El Centauro Pancho Villa”, “Martín Romero”, “El Corrido de Lupe Reyes”, “La Coyota”, por mencionar algunos.
Estuvo un año en Alemania como cantante invitado, en Frankfurt, vestido de charro. Ernesto Juárez contaba entre sus anécdotas que los alemanes le pedían “La cucaracha’’, canción que no la sabía, pero también le pedían ‘’Cielito lindo’’, ‘’La paloma’’y a fuerzas metió en ese repertorio su composición: “Juana Gallo”, teniendo éxito.
¡Ábranla que ahí viene Juana Gallo!
En el caso particular de “Juana Gallo”, él mismo escribió el argumento de la película, que protagonizó María Félix y fue doblada al inglés, francés y ruso.
Además, el tema ha dado vueltas por todo el mundo, ya que está incluido en “Estampas de la Revolución” del ballet folklórico de Amalia Hernández.
El corrido fue inspirado por Ángela Ramos, conocida como “Juana Gallo” en Zacatecas, quien sostenía que había andado en la Revolución y que había conocido a Pancho Villa, a quien admiraba profundamente.
Esa mujer (anciana cuando Ernesto Juárez la conoció), fue su inspiración para escribir el corrido “Juana Gallo”.
Fue tal el éxito de ese corrido que, en 1961, luego de que Ernesto Juárez presentara la idea los Zacarías para filmar la película, se iniciaron las grabaciones, bajo el argumento escrito por el propio Ernesto.
También escribió los argumentos cinematográficos de “La Coyota” y “La Coyota II”. La primera parte fue premiada en el Certamen de los Productores de Películas, en las Vegas, Estados Unidos, en 1984.
Actor de cine
Ernesto Juárez Frías fue también actor en más de setenta películas.
Multipremiado
Obtuvo múltiples premios y reconocimientos, de entre los que destacan: presea por su valiosa aportación musical el 30 de enero de 1989, en el Teatro de la Ciudad; homenaje de la Sociedad Musical Imre Kollman, el Instituto Mexicano de Ciencias y Humanidades y el Instituto Cultural Sor Juana Inés de la Cruz el 3 de agosto de 1990; magno homenaje tributado por diversas instituciones de Zacatecas, el 16 de septiembre de 1990, donde recibió la medalla “Agustín Lara”, que otorgaba la Sociedad de Autores y Compositores de Música; medalla Virginia Fábregas, que con motivo de sus 25 años como actor le entregó la Asociación Nacional de Actores el 17 de diciembre de 1990, en el teatro Jorge Negrete.
Fue socio del Instituto de Ciencias y Humanidades, de la Sociedad Cultural Sor Juana Inés de la Cruz, del Colegio de Abogados y de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, en la cual ha desempeñado el cargo de Presidente de la Sección Académica del Folklore.
Escribió en los periódicos “El Sol de Zacatecas”, “El Momento” y “Excélsior”. El 21 de enero de 1993 presentó su libro “Galería de Personajes Zacatecanos” en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México, junto con la exposición de los dibujos de su autoría que ilustran el libro.
La Casa de la Cultura en Nochistlán y el Auditorio en Ciudad Administrativa llevan su nombre.
