El país requiere un ambiente de certidumbre y un Estado de derecho sólido que permitan atraer más inversiones y, en consecuencia, fortalecer la actividad económica, asegura el empresario local Gerardo Rioja Garrido.
Las medidas de la actual administración federal deben sustentar un entorno de “reglas claras del juego”, para dar un incentivo a los dueños del capital y canalicen sus recursos a proyectos rentables que detonen la infraestructura y generen mayor número de empleos formales.
Con base en un diagnóstico del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), señaló que no hay duda de que la inversión es el principal motor del crecimiento y ésta proviene principalmente del sector privado, pues de este rubro corresponde 86% del total de la inversión del país.
Rioja Garrido añade que el CCESP apunta que las autoridades deben asumir el compromiso de generar un entorno de seguridad y facilidad para atraer el capital privados a los proyectos públicos, pues es claro que el gobierno federal no cuenta con los recursos suficientes
Enfatizó que lo anterior seguirá así mientras su prioridad sea el gasto social y, por ello, urgió a contrarrestar los pronósticos negativos de la economía si el objetivo es lograr tasas de crecimiento superiores al 2.0 por ciento.
En un escenario en el que los flujos de inversión, tanto nacional como extranjera se mantienen cautelosos, aumenta la probabilidad de cumplimiento de los pronósticos de un menor crecimiento de la economía para el presente año y, por tanto, también implica una menor capacidad de generar los empleos que requiere la población, sostuvo.
Conforme se van dando a conocer los resultados de los principales indicadores económicos durante 2018, se confirma que la actividad económica del país se debilitó en la parte final del año pasado. Entre los resultados publicados que reflejan esta situación se encuentra en inicio, la estimación oportuna del PIB del cuarto trimestre del año, que anticipa que la economía creció a una tasa trimestral de 0.3% y una anual de 1.9%, de tal forma que el avance para todo el año habrá sido de 2.0%, porcentaje que es una décima de punto porcentual menor al pronóstico de los especialistas, incluso ya corregido a la baja, señala el CEESP.
Sin embargo, aunque regularmente no hay cambios entre la estimación y el dato definitivo que da a conocer el INEGI sobe el crecimiento del PIB, en esta ocasión no sería extraño que pudiese verse un ajuste, toda vez que en ese lapso se presentaron diversos factores que al parecer no están considerados en la estimación y que pueden tener alguna incidencia en el ritmo de desempeño de la economía.
EL DATO:
Las autoridades deben asumir el compromiso de generar un entorno de seguridad y facilidad para atraer el capital privados a los proyectos públicos