Ante el nuevo mapa electoral que se ha presentado y el próximo cambio de mandato en los poderes Ejecutivo y Legislativo, tanto federal como a nivel local, la Iglesia espera que los gobernantes y políticos dejen atrás el encono y predomine el diálogo de altura y dignidad.
El vocero de la Diócesis de Aguascalientes, Carlos Alberto Alvarado Quezada, puntualizó que el llamado es para que se busque la reconciliación entre actores políticos e inclusive entre grupos sociales que se vieron enfrentados en el proceso que está por terminar.
“Es tiempo de dejar de lado las polarizaciones que tanto afectan, dañan y dividen al país, antes bien, se debe buscar la unidad a través del trabajo y de la reconstrucción del tejido social que resultó dañado en el tiempo de campañas”.
Se debe dejar atrás, comentó en rueda de prensa, el clima de violencia que se ha vivido en muchos lugares del país, con más de un centenar de muertes, “es lamentable que la experiencia haya dejado sin vida a muchos actores políticos, aspirantes a candidatos, reporteros, policías, militares, sacerdotes y parte del pueblo común”.
Alvarado Quezada recalcó que todos los mexicanos “somos corresponsables en la construcción de un México mejor”, por lo que después de las elecciones se debe ir en busca de la construcción de la paz que se logrará paso a paso, “todos debemos convertirnos en sembradores de paz, hoy más que nunca México necesita caminar con tranquilidad y seguirse construyendo”.
Urge, dijo, construir un mejor México, con más oportunidades de desarrollo humano integral para todos, dejar de lado, insistió, los resentimientos y la violencia.
FRASE
“Es tiempo de dejar de lado las polarizaciones que tanto afectan, dañan y dividen al país, antes bien, se debe buscar la unidad a través del trabajo y de la reconstrucción del tejido social”.
Carlos Alberto Alvarado Quezada
Vocero de la Diócesis de Aguascalientes
