Improductivas, hasta una cuarta parte de las jornadas laborales de los trabajadores, especialmente dentro de las micro y pequeñas empresas.

Salvador Esqueda, presidente del Ceinnova, expresó que si bien en periodo de tiempo, los obreros mexicanos están entre quienes más horas laboran a la semana, también son de los menos productivos, pues de las jornadas de ocho horas, se estima que sólo es efectivo 75% de dicho tiempo.

Detalló que gran parte de las horas laborales se pierde en acciones que no corresponden a las propias del trabajo, como preparar y tomarse un café, salidas para fumarse un cigarrillo, el arreglo personal, horas para el refrigerio, alistarse para salir media hora antes de que concluya la jornada y el “chacoteo”.

Salvador Esqueda subrayó que es necesaria una metodología para que los trabajadores sean más productivos, retomando los esquemas de las grandes empresas, como puede ser los incentivos monetarios para que el personal se discipline, trabajando con base a metas y tareas, brindándole un incentivo económico de lograrlos, ya que los ingresos son lo que más motivan.

Manifestó que la productividad es un punto en el cual tienen que trabajar empresarios y trabajadores, y una vez que se mejore en este rubro, entonces sí, analizar la posibilidad de reducir las jornadas laborales.

Para finalizar, el Presidente del Ceinnova dijo que trabajando menos horas los empleados tendrían la mente más despejada y estarían más concentrados, logrando así un desempeño más eficiente y de mayor calidad, es por ello que en algunos países desarrollados sólo trabajan cuatro días a la semana o han decidido reducir sus jornadas laborales a seis o siete horas diarias.

EL DATO

Con esquemas eficientes podrían reducirse las jornadas de trabajo.