Al ser la escuela el lugar en el que se reflejan todas las problemáticas sociales que se tienen en la actualidad, debería ser también un espacio dotado de las herramientas necesarias para contribuir en la solución de los problemas.
Sin embargo, en estos espacios no se cuenta con especialistas como médicos, psicólogos o trabajadores sociales y los maestros requieren mayor capacitación para atender las problemáticas actuales que rebasan su labor académica, señaló ayer el investigador educativo Alberto Sandoval Esquerra.
Se ha podido constatar que, en la mayoría de las instituciones, hay personal consciente de su responsabilidad docente, pero requieren ayuda para la solución de problemas específicos.
Mencionó que es necesario contar con un médico en cada escuela. "Diariamente las autoridades de los planteles tienen que atender no uno sino varios niños enfermos y el problema del que más se quejan es del estómago, porque no desayunan o porque su mamá les dio como almuerzo una dona o unas papitas. Lo peor es que no se les puede administrar ningún medicamento porque a veces son niños que están en algún tratamiento y lo único que les puedo dar es un té", mencionó.
Tampoco es posible llevarlos a un hospital porque los casos son muy frecuentes y se descuidan otras actividades que tienen que ver con lo académico.
Aseguró que cuando los menores no han almorzado hay ocasiones en que, incluso, los maestros cooperan para comprarles algo y evitar que estudien con el estómago vacío.
También externó la necesidad de contar con un psicólogo para prevenir problemas de violencia escolar.
Y agregó: "Si el niño presenta mala conducta por algún problema en su casa, los directores o directoras lo atienden. Es el maestro de grupo el que, en realidad, debe hacer todo".
La realidad en las escuelas es otra e incluso la Directora de un plantel de la zona Centro manifestó que, ante la falta de capacitación de los maestros para atender casos fuertes de violencia, se ha planteado en varias reuniones a las autoridades educativas la necesidad de que en cada escuela haya un psicólogo o un trabajador social como ocurre en las secundarias; sin embargo no ha habido respuestaSandoval Esquerra
"En la escuela explota lo que está pasando en la casa a pesar de que nos vean como responsables", manifestó.
Aunque hay maestros que no cumplen con su labor, son mayoría los que sí trabajan con vocación. Admitió que es difícil controlar a los alumnos cuando sus papás no participan de manera activa en su formación. "A la escuela le podemos poner mil reglamentos y a los alumnos y maestros también, pero mientras en casa se sigan viviendo problemas de violencia, cuestiones de violaciones, de omisión de cuidados cuando los papás trabajan todo el día, las cosas no van a cambiar", mencionó.
EL DATO:
Hacen falta psicólogos para poner freno a la violencia escolar