En base a las proyecciones del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), el crecimiento económico de México será inferior al promedio de los últimos 10 años y al de las 3 décadas pasadas (2.5%).
A ello contribuyen elementos estructurales, de coyuntura y la estrategia de política económica adoptada. Para el 2019, el IDIC estima un crecimiento de 0.9%, (con un rango de variación de entre 0.5% y 1.3%). Lo anterior se encuentra condicionado por una prospectiva a la baja en el sector industrial: una disminución en su PIB de (-) 0.6% (con un intervalo de entre –1.0% y -0.2%).
La contracción del sector secundario de la economía está vinculada a un pronóstico generalizado de menor actividad en sus principales componentes: construcción, generación y distribución de electricidad, gas y agua, minería (en este último por la depresión que existe en la extracción de petróleo y gas) y en menor medida por la desaceleración que se observa en las manufacturas. La inercia de un modelo económico carente de Política Industrial provocará que el sector entre a un terreno negativo.
Asociado con la menor dinámica productiva se tiene al menor ritmo de inversión que se observará a lo largo del 2019: (-) 3.2%. Los indicadores de confianza empresarial, la tendencia adversa heredada del 2018, el modesto presupuesto público en inversión, la tensión económica, migratoria y política con Estados Unidos y el incremento en las tasas de interés forman parte de un entorno que ha incidido negativamente en la perspectiva de inversión.
El efecto sobre el mercado laboral formal será evidente: se avizora un aumento de 475 mil registros en el IMSS (positivo, pero casi 190 mil menos que en 2018).
Lo anterior redunda en una inflación que será inferior a la observada durante los últimos años, una consecuencia del menor consumo privado y de la política instrumentada para contener los incrementos en los precios de los combustibles (parte de ello a cambio de un aumento en los subsidios a los mismos). El IDIC estima que en 2019 la inflación será de 4.3%.
Para el caso del tipo de cambio (interbancario) se prevé una cotización de 20.2 pesos por dólar al cierre del año. Ello es resultado de una prospectiva de mayores presiones sobre el peso a partir del segundo trimestre del año.
Desde esta perspectiva, el IDIC considera que será necesaria la implementación de una política económica contingente para enfrentar la desaceleración económica. El IDIC mantiene que la propuesta de política industrial basada en lo Hecho en México, de fomento a la inversión, a la integración de cadenas productivas y de financiamiento de la banca de desarrollo constituyen elementos clave para evitar que aumente el letargo económico.
LA CIFRA:
Se prevé un crecimiento de apenas 0.9%