A pesar de los trabajos de infraestructura pública para auxiliar a las personas invidentes en sus desplazamientos, todavía falta mucho para favorecer a este núcleo de población que se incrementa constantemente por cuestiones hereditarias o como resultado de algún accidente o enfermedad, particularmente por la diabetes.
Al respecto, Genoveva Herrera Hernández, integrante de la agrupación denominada como Ciegos Progresistas, mencionó que son muchos los obstáculos que tienen que enfrentar como las banquetas levantadas por las raíces de los árboles, además de que algunas de estas plantas no han crecido lo suficiente y se pegan con sus ramas en la cabeza o en la cara.
Además, “varios negocios y bares colocan anuncios o mesas sobre la banqueta que provocan que nos tropecemos además de los puestos que se colocan sobre la vía pública, de tal forma que, en suma, no se ha hecho mucho por nosotros, tanto por parte de las administraciones públicas como de la sociedad”.
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Por lo que:
Pienso que no se ha avanzado mucho, ya que por ejemplo en los nuevos fraccionamientos las banquetas se construyen sin colocar las rampas, en este caso para las personas que se desplazan en sillas de ruedas.
No es, resaltó, “por el hecho de que aparentemente somos muy pocos los que carecemos del don de la vista a pesar de que en todo el estado debemos de ser más de 500 personas las que vivimos en esta situación y hemos notado que ya hay muchos niños invidentes y no sé a qué se deba esta situación, porque en nuestro caso, fue la diabetes las que nos afectó la vista”.
Señaló que “por la pandemia tenía yo mucho tiempo sin ir al centro de la ciudad, lo hice hace pocos días y me quedé sorprendida de la cantidad de ciegos que se sitúan en las esquinas pidiendo caridad, lo que me hace crecer que cada día somos más, sin poder trabajar y no tenemos quien nos auxilié con alguna pensión”.
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Lo único que “estamos recibiendo es lo que nos está entregando el presidente Andrés López Obrador, dos mil 700 pesos bimestralmente, o sea, casi nada, pero eso es todo, no hay mayor atención no sólo a nosotros sino a todas las personas con alguna discapacidad, quienes no podemos hacer uso del transporte urbano para poder trasladarnos, lo tenemos que hacer en taxi y ahí se va toda la ayuda”.
De tal forma que:
Para ir al médico o realizar alguna actividad pues tenemos que hacerlo en taxi y ya se escucha la demanda de incrementar la tarifa de este transporte, y el poco dinero que logramos obtener sólo nos sirve para mal comer.
Genoveva Herrera Hernández, Integrante de la agrupación Ciegos Progresistas
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