A pesar que en el vecino estado de Jalisco y en algunos poblados de Zacatecas se han detectado la presencia de alcohol adulterado, e incluso personas que lo consumen han perdido, la vida, en Aguascalientes no se tiene, hasta el momento, esta problemática.
El director de regulación sanitaria del Instituto de Servicios de Salud del estado (ISSEA), Octavio Jiménez Macías, reconoce que de manera constante se han llevado a cabo operativos de detección de este tipo de productos apócrifos, sin embargo, hasta el momento no se ha detectado la venta o uso de los mismos.
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Luego de la reapertura paulatina de bares, en todo el territorio estatal, se aprovecha también la presencia y recorridos de la guardia sanitaria en estos sitios para realizar la toma de muestras y posterior análisis de las bebidas que se ofrecen, sin que hasta el momento se tengan resultados positivos a falsificación o alteración de licores.
Jiménez Macías reconoce sin embargo que la mayor parte de este problema se concentra en la venta a granel de bebidas embriagantes, generalmente utilizadas para fiestas y reuniones.
Si bien hasta el momento las revisiones arrojadas a este tipo de comercialización tampoco reflejan problema alguno, sí se recomienda a los ciudadanos no adquieran bebidas en esta presentación, toda vez que, si bien son muy baratas, existe el riesgo que personas sin escrúpulos alteren las mismas con sustancias peligrosas, o bien que éstas no cumplan con los procedimientos autorizados sanitariamente para su fabricación.
“Fue de todos conocido que hace pocas semanas en el estado de Jalisco se registraron varias muertes entre personas que consumieron bebidas alcohólicas de origen apócrifo. Es claro que, si bien hasta el momento afortunadamente estamos libres de este problema, en cualquier momento quienes lo comercializaban allá pueden hacerlo en Aguascalientes, dada la cercanía que tenemos con ellos”, refiere el funcionario.
Ante ello, refiere, quien pretenda ingerir este tipo de bebidas, deberá comprar el líquido en un lugar establecido y debidamente registrado; revisar que la botella no se encuentre abierta y, ante cualquier alteración de color, sabor o textura del contenido, no ingerirlo.
En el caso de bares y restaurantes donde se sirve por copeo, se debe exigir a los meseros que sirvan a la vista de los comensales y, bajo ninguna circunstancia, comprar productos muy por debajo de su precio en el mercado.
RECOMENDACIÓN
Nunca y bajo ninguna circunstancia se debe adquirir alcohol a granel
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