Luego de la euforia que ha causado entre los mexicanos la llegada del pequeño y novedoso carro Chang Li S1 pro, un vehículo eléctrico fabricado por la empresa automotriz china Changzhou Xili Car Industry, que además de su tamaño y facilidad para adquirirlo, lo más atractivo es el precio, pues solo cuesta 20 mil pesos, razón por la cual, la industria automotriz se encuentra preocupada.
Rogelio Padilla de León, secretario general del sindicato de la Industria Automotriz y Metalmecánica, señaló que el consumidor muchas veces se deja llevar por el precio y no tanto por la calidad, por tanto, se corre el riesgo de que estos vehículos empiecen a incursionar en el mercado, no obstante, al ser fabricados en china, aquí no se cuenta con las autopartes y refacciones que puedan llegar a necesitar, si bien, en este tipo de coches lo importante es la batería y puedan solventar esa necesidad, pero se verán expuestos a accidentes y saldrá contraproducente.
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Subrayó que, esto es un tema importante que debe de revisar el gobierno federal, así como la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), ya que además de representar un peligro para los usuarios también viene a representar una amenaza para la industria automotriz, por lo que debe de haber una regulación.
Apuntó que estos vehículos son una bomba de tiempo, ya que considera que:
son vehículos chatarra por no contar con los lineamientos de seguridad que deben tener, son como un carro de juguete que no deberían permitir que circulen tanto en la ciudad como en carreterasRogelio Padilla de León, secretario general del sindicato de la Industria Automotriz y Metalmecánica
Destacó que efectivamente existe preocupación en el sector automotriz, aunque, “quien tenga poder adquisitivo es probable que no compre este tipo de vehículos, pero quienes no cuentan con el dinero suficiente, ahorita el coche compacto más barato en México ronda entre los 250 a los 280 mil pesos, por tanto, les resultará atractivo adquirir el carro chino y al incrementarse el volumen de venta, podrá disminuir la producción en las armadoras”, señaló.
DATO: Se debe de considerar que además del costo se tiene que pagar el costo aduanal, permisos y envío, por lo que el precio final puede llegar hasta los 50 mil pesos.
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