Nuevas disposiciones dejan a los comercios sin bolsas de plástico; y a los cerillos sin propinas en los bolsillos.
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En un sondeo realizado por EL SOL DEL CENTRO entre empacadores de tres centros comerciales distintos, la totalidad de las personas consultadas reconocen que sus ingresos han descendido de una semana a la fecha, cuando entraron en vigor las nuevas disposiciones ambientales.
Un grupo de cuatro cerillos que se encontraban descansando –todos ellos personas de la tercera edad– coincidieron en señalar que reciben menos propinas de las habituales, aunque incluso entre ellos hubo diversidad de opiniones: tres de ellos sí se mostraron molestos y preocupados por esta situación, pues representa un golpe para sus finanzas personales; un cuarto –en un tono más positivo– reconoció que sus percepciones son menores, pero las suficientes como para sobrellevar sus gastos.
