Aunque se decrete la reapertura de la economía, el sector gastronómico no volverá a la normalidad, por lo cual, los restaurantes tendrán que evolucionar para adaptarse a las nuevas condiciones sanitarias y sociales.
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Claudio Innes Peniche, presidente estatal de la Canirac, dijo que los establecimientos estarán obligados a manejar esquemas de higiene mucho más elevados de los que tenían antes de la pandemia de Covid-19; es probable que operen a una menor capacidad, con solo 50% de las mesas disponibles para los comensales; precisó que estas pautas las definirán las autoridades locales.
Consideró que el sector gastronómico va a seguir impulsando fuertemente las modalidades como la comida para llevar y las entregas a domicilio, con la finalidad de compensar la disminución de la clientela en los establecimientos.
Claudio Innes señaló que para evitar una merma en los ingresos, los restaurantes podrían tratar de introducir la modalidad de bebidas para llevar –que representan un alto porcentaje de las ganancias de los establecimientos–, aunque para ello, van a necesitar la autorización de los gobiernos locales.
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