A inicios del próximo año comenzarán a dispersarse los recursos del seguro catastrófico, ante las pérdidas de cosechas que hubo este año en el campo a causa de la sequía; autoridades estiman que agricultores de un aproximado 40 mil hectáreas podrían recibir alguna compensación económica.
Manuel Alejandro González Martínez, titular de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroempresarial (Sedrae), precisó que el seguro aplica en exclusiva a la superficie que sí se sembró; en el pasado ciclo agrícola se establecieron aproximadamente 65 mil hectáreas de maíz –de las 95 mil hectáreas que se siembran regularmente–, no todas serán susceptibles de ser indemnizadas, pero se estima que lo haga al menos 66%, a causa de la sequía.
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Para determinar el área siniestrada, continúa el proceso de evaluación en campo de la superficie siniestrada, para precisar a cuánto ascendió el daño, proceso que realizan agentes de la empresa aseguradora y personas de la Sedrae; en el caso del maíz, el apoyo por pérdida total asciende a 1,500 pesos por hectárea.
González Martínez dijo que vigilarán que todo lo que fue sembrado y haya sido siniestrado a causa de la sequía reciba una compensación; precisó que el seguro catastrófico también cubre pérdidas de guayaba y vid por heladas, en uva ya recibieron su compensación propietarios de aproximadamente 45 hectáreas afectadas por una granizada.
Apuntó que la compensación se estima a partir de un rendimiento promedio esperado, y se hace una ponderación con relación a la cosecha obtenida, con base a eso se compensa: 1,500 por pérdida total –en el caso del maíz–, pero reciben un porcentaje si las condiciones meteorológicas solo afectaron en cierto porcentaje el rendimiento.
Finalmente, el titular de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroempresarial apuntó que los datos sobre la siniestralidad también permitirán determinar si habrá una escasez para la alimentación del ganado el próximo año en cuestión de forrajes.
1,500
Pesos recibirán por hectárea siniestrada totalmente
