Tras el aumento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que entrará en vigor a partir del 1 de enero y que será del 3%, en gasolinas, cigarros y bebidas saborizadas, consumidores de combustibles externaron su inconformidad, ya que una de las promesas del actual Presidente de la República Mexicana fue que no aumentaría el costo a la gasolina.
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Si bien, Andrés Manuel López Obrador fue claro en que no habrá aumento directo en el precio al consumidor, y son los propietarios de las gasolineras que deberán ajustar los costos, éstos señalan que no hay Ley que los obligue a no incrementar el precio a combustibles, es por eso que si se ven en la necesidad de aumentar costos, lo harán.
En cuanto a usuarios de automóviles, lamentan haber dado su voto de esperanza a AMLO, ya que con el posible aumento a combustibles se verán ampliamente afectados, ya que el vehículo en el que se transportan es su medio para laborar.
Asimismo, la mayoría de los consumidores señalaron que debería ser equitativo, es decir, aumentar precio en combustibles y de la misma manera realizar un ajuste al salario, para con esto solventar el gasto y que su economía no se vea tan afectada.
Además, los automovilistas mencionaron que es una lástima que a pesar de que una de las propuestas fue no aumentar el precio a combustibles, el siguiente año se presente un posible aumento a los mismos.
