No todas las infecciones por Covid-19 son idénticas, hay casos leves, otros moderados, que son los que experimenta la mayoría de las personas, pero también severos, y en cada uno de los grados la recuperación y tardará diferentes lapsos de tiempo con varias secuelas.
Así lo explicó el epidemiólogo Francisco Márquez Díaz, quien indicó que la persona que ha tenido que ser intubada es porque enfrentó un Covid-19 severo “por lo que el impacto de la enfermedad, en estos casos habrá de requerir de un periodo de recuperación de hasta seis meses, hay pacientes que han estado hospitalizados 90 días en promedio para poder sobrevivir a la enfermedad, más otro lapso igual para alcanzar una vida funcional”.
Antes de eso, “la persona experimentará fatiga, trastornos de sueño, dolor muscular, de cabeza, de pecho, de articulaciones, sensación de falta de aire y en el caso de las mujeres, ellas van a sufrir trastornos menstruales, por lo que esta es una enfermedad que incluso en las formas leves puede dejar distintas manifestaciones”.
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Este es el escenario post- Covid-19, “pero existe el Covid-19 prolongado que es más difícil de diagnosticar, es decir personas que pueden continuar con una sintomatología de inflamación en algún órgano vital consecuencia de la activación de esa inflamación provocada por el virus, y lo mismo puede ocurrir si se sufre una enfermedad leve o moderada”.
En el caso del Covid-19 grave, “vamos a permanecer en el hospital con oxígeno y vamos salir necesitando con cuidados casi hospitalarios en casa y esto se agrava cuando el paciente ya sufría enfermedades preexistentes le incrementa el grado de dificultad para enfrentar la enfermedad y durante la convalecencia y es ahí donde poblaciones vulnerables como los diabéticos, los cardiópatas, personas que tienen trasplantes de órganos, con VIH, lupus o personas muy vulnerables, es más complicado su tratamiento”.
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Pero no se sabe aún, si habrá secuelas prolongadas ya que la enfermedad tiene apenas poco más de un año, “por lo que aún no se puede hablar de secuelas permanentes, esto aún no se puede definir, así que hasta que pase un poco más de tiempo, podremos saber más de las complicaciones que podamos definir como una secuela prolongada”.
Es por lo anterior que “debemos insistir en que en Aguascalientes tenemos aparentemente menos casos, con un semáforo epidemiológico en naranja, sin embargo, la mortalidad por esta enfermedad no ha bajado, hay aparentemente menos casos, pero es que los diagnósticos no son amplios”.
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