Uno de los proyectos de investigación científica que frena en el estado el Covid-19, es el de un sistema de tecnología aérea para detectar oportunamente si los cultivos están o no teniendo un buen desarrollo vegetativo.
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El proyecto fue iniciado en el marco de una plática entre el Comité Nacional Sistema Producto Ajo y Ernesto Olvera Gonzalez, investigador y coordinador del laboratorio de Iluminación Artificial del Tecnológico Nacional de México (TecNM) campus Pabellón de Arteaga.
El objetivo es optimizar el trabajo de los productores de ajo, inicialmente en los estados de Zacatecas, Guanajuato, Aguascalientes y Jalisco.
El sistema consiste en varias cámaras instaladas en un dron, con el que inicialmente se estarán monitoreando cultivos de ajo a fin de detectar si están o no teniendo un buen desarrollo vegetativo, si se está iniciando alguna enfermedad, deficiencia en la nutrición del cultivo, falta de agua o existe algún otro problema, informó Ernesto Olvera, quien subrayó que:
Trabajamos para descubrir necesidades desde la siembra hasta la cosecha con alta tecnología aérea
Explicó que...
Con esta tecnología se podrá incluir conexión satelital, incluso hay algunas aplicaciones que nos permiten realizar monitoreo con imágenes tomadas desde el espacio, por lo pronto se podrán realizar extensos recorridos aéreos utilizando drones adaptados sobre los campos de ajoErnesto Olvera Gonzalez, investigador y coordinador del laboratorio de Iluminación Artificial del Tecnológico Nacional de México
Las características de estos drones profesionales, explicó, “es que están equipados con cámaras especializadas para poder hacer toma de imágenes de diferentes alturas, (que es parte del proyecto), tienen la capacidad de detectar obstáculos y amenazas como pueden ser algunas aves”.
Dentro del dron experimental “se colocaron cámaras térmicas, cámaras RGB (color) y cámaras con un filtro especial de infrarrojos, por medio de las cuales se pueden detectar ciertos índices vegetativos del cultivo y que son los indicadores de salud."
El primer objetivo es que con estos drones se podrán recorrer grandes extensiones de cultivos, de 200 a mil hectáreas, de forma rápida y enviando imágenes a una computadora donde se analizan para detectar cualquier anomalía y tratar de subsanarla a tiempo.
Ernesto Olvera proyecta que este sistema pudiera estar mucho más desarrollado en un lapso de cuatro años, “por lo pronto hay problemas a resolver como el peso de las imágenes, cada una puede ser de hasta 11 megas y nosotros en un sólo recorrido de unas tres hectáreas podemos tomar hasta 300 imágenes”.
POSICIÓN
México se ubica internacionalmente, dentro de los 10 primeros lugares en producción de ajo
