El nombramiento de la nueva ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación va más allá de un evidente conflicto de interés, es parte de una una estrategia gubernamental para someter al Poder Judicial y concentrar el mando en manos de un solo hombre.

El vocero del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Acción Nacional, Fernando Herrera Ávila advirtió que el hecho de que la hoy ministro Yasmín Esquivel Mossa sea la esposa de uno de los constructores consentidos del sexenio no es un asunto menor, pero tampoco es el más importante.

Lo aberrante de la situación es que el jefe del Ejecutivo someta tanto al Poder Legislativo, para procesar el nombramiento, como al Poder Judicial para actuar sin contrapesos. Ese nombramiento forma parte de una estrategia bien definida para poner todo el poder en manos de un solo hombre, con sus subordinados ocupando todas las áreas decisivas del poder públicoHerrera Ávila consideró como un grave retroceso que los poderes que se creían autónomos vuelvan a ser dependientes, como lo fueron durante la dictadura perfecta registrada en el régimen de partido único.Hizo un llamado a los actores políticos y a los ciudadanos a no permitir esta aberración y mantenerse atentos a un fenómeno que hemos visto en otros países.

Lamentablemente. Acción Nacional no tiene los votos para impedirlo, pero no nos vamos a quedar callados ante la concentración de poder.Fernando Herrera Ávila