/ viernes 18 de junio de 2021

El Espectador | Las ciudades mexicanas prohibidas por Washington

La actividad del crimen organizado, incluidos tiroteos, asesinatos, robos a mano armada, robo de vehículos, secuestros, desapariciones forzadas, extorsión y agresión sexual, es común a lo largo de la frontera norte y en Ciudad Victoria. Los grupos criminales apuntan a los autobuses de pasajeros públicos y privados, así como a los automóviles privados que viajan a través de Tamaulipas, a menudo transportando pasajeros y exigiendo pagos de rescate.

“Los miembros fuertemente armados de grupos criminales a menudo patrullan áreas del estado y operan con impunidad, particularmente a lo largo de la región fronteriza desde Reynosa hasta Nuevo Laredo. En estas áreas, la policía local tiene una capacidad limitada para responder a incidentes delictivos. La capacidad de hacer cumplir la ley es mayor en el área de las tres ciudades de Tampico, Ciudad Madero y Altamira, que tiene una tasa más baja de actividad delictiva violenta en comparación con el resto del estado”, advierte a sus ciudadanos el gobierno de Estados Unidos.

El Departamento de Estado, encabezado por Antony Blinken, lanzó advertencias ayer, no solamente a sus ciudadanos: “Los empleados del gobierno de los Estados Unidos no pueden viajar entre ciudades de Tamaulipas utilizando las carreteras del interior de México. El viaje entre Nuevo Laredo y Monterrey se limita a la Carretera Federal 85D durante el día con autorización previa”.

No únicamente es Tamaulipas, el equipo de Blinken pide a todos los estadounidenses no viajar a Colima, ni a Guerrero, Michoacán o Sinaloa. Y solicita que reconsideren viajar a Baja California, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Nayarit, Sonora y Zacatecas.

¿Cuál es la descripción que hacen de México desde el Departamento de Estado de Estados Unidos? Más o menos así: “Los delitos violentos, como el homicidio, el secuestro, el robo de vehículos y el robo, están muy extendidos y son comunes en México. El gobierno de Estados Unidos tiene una capacidad limitada para brindar servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses en muchas áreas de México, ya que los viajes de empleados del gobierno de EU a ciertas áreas están prohibidos o restringidos. En muchos estados, los servicios de emergencia locales son limitados fuera de la capital del estado o de las principales ciudades”.

Tecomán, en Colima, es por ejemplo uno de los pueblos que tienen prohibido visitar los empleados de Washington en nuestro país.

Tampoco pueden acercarse a la frontera con Michoacán. La prohibición incluye que los funcionarios del norte no visiten Acapulco, Zihuatanejo e Ixtapa, en Guerrero. Y deben tener especial cuidado en Sinaloa, si tienen que ir a Mazatlán, Los Mochis o Topolobampo, sólo moverse por aire o por mar, evitar rutas terrestres, por los peligros que eso representa.

Sin rodeos, el nuevo gobierno de Joe Biden confirma que México es muy peligroso y de preferencia, los estadounidenses deben evitar ser asaltados, secuestrados o asesinados, en esta nación amiga.

Deben tomar en cuenta si se atreven a venir, hay zonas en donde los que podrían cuidarlos y atenderlos no pueden llegar. Venir a México claramente no es como viajar a Disney, ni todo es Cozumel o la Condesa.

La actividad del crimen organizado, incluidos tiroteos, asesinatos, robos a mano armada, robo de vehículos, secuestros, desapariciones forzadas, extorsión y agresión sexual, es común a lo largo de la frontera norte y en Ciudad Victoria. Los grupos criminales apuntan a los autobuses de pasajeros públicos y privados, así como a los automóviles privados que viajan a través de Tamaulipas, a menudo transportando pasajeros y exigiendo pagos de rescate.

“Los miembros fuertemente armados de grupos criminales a menudo patrullan áreas del estado y operan con impunidad, particularmente a lo largo de la región fronteriza desde Reynosa hasta Nuevo Laredo. En estas áreas, la policía local tiene una capacidad limitada para responder a incidentes delictivos. La capacidad de hacer cumplir la ley es mayor en el área de las tres ciudades de Tampico, Ciudad Madero y Altamira, que tiene una tasa más baja de actividad delictiva violenta en comparación con el resto del estado”, advierte a sus ciudadanos el gobierno de Estados Unidos.

El Departamento de Estado, encabezado por Antony Blinken, lanzó advertencias ayer, no solamente a sus ciudadanos: “Los empleados del gobierno de los Estados Unidos no pueden viajar entre ciudades de Tamaulipas utilizando las carreteras del interior de México. El viaje entre Nuevo Laredo y Monterrey se limita a la Carretera Federal 85D durante el día con autorización previa”.

No únicamente es Tamaulipas, el equipo de Blinken pide a todos los estadounidenses no viajar a Colima, ni a Guerrero, Michoacán o Sinaloa. Y solicita que reconsideren viajar a Baja California, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Jalisco, Estado de México, Nayarit, Sonora y Zacatecas.

¿Cuál es la descripción que hacen de México desde el Departamento de Estado de Estados Unidos? Más o menos así: “Los delitos violentos, como el homicidio, el secuestro, el robo de vehículos y el robo, están muy extendidos y son comunes en México. El gobierno de Estados Unidos tiene una capacidad limitada para brindar servicios de emergencia a ciudadanos estadounidenses en muchas áreas de México, ya que los viajes de empleados del gobierno de EU a ciertas áreas están prohibidos o restringidos. En muchos estados, los servicios de emergencia locales son limitados fuera de la capital del estado o de las principales ciudades”.

Tecomán, en Colima, es por ejemplo uno de los pueblos que tienen prohibido visitar los empleados de Washington en nuestro país.

Tampoco pueden acercarse a la frontera con Michoacán. La prohibición incluye que los funcionarios del norte no visiten Acapulco, Zihuatanejo e Ixtapa, en Guerrero. Y deben tener especial cuidado en Sinaloa, si tienen que ir a Mazatlán, Los Mochis o Topolobampo, sólo moverse por aire o por mar, evitar rutas terrestres, por los peligros que eso representa.

Sin rodeos, el nuevo gobierno de Joe Biden confirma que México es muy peligroso y de preferencia, los estadounidenses deben evitar ser asaltados, secuestrados o asesinados, en esta nación amiga.

Deben tomar en cuenta si se atreven a venir, hay zonas en donde los que podrían cuidarlos y atenderlos no pueden llegar. Venir a México claramente no es como viajar a Disney, ni todo es Cozumel o la Condesa.