/ martes 26 de abril de 2022

El Ágora | México feminicida

México y en especial el estado de Nuevo León, se ha presentado una ola de feminicidios en el tiempo reciente, y el caso de la joven de 18 años Debanhi Escobar tomó mucha relevancia en redes sociales y los medios de comunicación tradicionales, ya que comenzó como una búsqueda por que se creía desaparecida, pero lamentablemente cuando la encontraron ya le habían arrebatado la vida.

Todo comenzó el 8 de abril del presente año cuando Debanhi Susana Escobar Bazaldúa fue a una fiesta y de regreso a su hogar desapareció, por lo que se comenzó la búsqueda para encontrarla, pero el 21 de abril fue cuando encontraron un cuerpo sin vida en los alrededores donde había desaparecido, y fue hasta el 22 de abril cuando confirmaron que se trataba del cuerpo de la joven.

Este suceso claramente no es un hecho aislado, ya que en promedio en México son asesinadas 10 mujeres al día, por lo que nuestro país ocupa uno de los primeros lugares en víctimas de feminicidio a nivel internacional, lo que es preocupante para toda la sociedad, ya que podríamos conocer a la siguiente víctima de este tan atroz e inhumano acto.

En los últimos días los medios de comunicación y las redes sociales han estado llenos de información sobre el caso de Debanhi, desde boletines de búsqueda hasta llamados al gobierno federal para el esclarecimiento de los hechos, ya que la fiscalía del estado de Nuevo León ha mostrado información con muchas inconsistencias, al grado de que el lugar donde fue encontrado el cuerpo de la joven, había sido revisado en múltiples ocasiones sin encontrar rastro de nada, pero casualmente en la última inspección localizaron el cuerpo.

Todas las inconsistencias que envuelven este caso solo están ocasionando que la gente tenga aún más desconfianza en los órganos de gobierno competentes para conocer sobre este tipo de hecho delictivos, ya que hacen pensar que la fiscalía está coludida de alguna forma con los criminales, ya que incluso la familia de la víctima realizó una segunda autopsia al cuerpo, y esta arrojó un resultado diferente a los mencionados por la fiscalía, por lo que me pregunto ¿Podemos confiar plenamente en estas autoridades?

He seguido este caso de cerca y puedo decir que hoy me encuentro decepcionada de las autoridades, pero en especial de la sociedad, ya que todos hemos contribuido de alguna manera para que este tipo de actos sigan consumándose en nuestro país, ya que acciones como no educar adecuadamente a nuestros hijos o permitir que amigos o conocidos tengan conductas inapropiadas, hacen que muchas personas piensen que está bien actuar de esa manera, desencadenando conductas aún peores en el futuro, por lo que deberíamos de empezar a cambiar como sociedad para que todas las mujeres que estamos en México puedan sentirse seguras.

El fin de semana vi algunas entrevistas que le hicieron a la familia de Debanhi, en especial a su padre, y ver esto me destrozaron el corazón, ya que soy madre de una niña y el sentimiento que me causa el solo pensar en que le podría sucederle algo así es algo que con palabras no se puede transmitir, pero que me alimenta para luchar por un mejor futuro para ella y para todas las mujeres, para que en el futuro puedan salir a las calles y sentirse seguras de que la sociedad la cuida y que el gobierno también.

México y en especial el estado de Nuevo León, se ha presentado una ola de feminicidios en el tiempo reciente, y el caso de la joven de 18 años Debanhi Escobar tomó mucha relevancia en redes sociales y los medios de comunicación tradicionales, ya que comenzó como una búsqueda por que se creía desaparecida, pero lamentablemente cuando la encontraron ya le habían arrebatado la vida.

Todo comenzó el 8 de abril del presente año cuando Debanhi Susana Escobar Bazaldúa fue a una fiesta y de regreso a su hogar desapareció, por lo que se comenzó la búsqueda para encontrarla, pero el 21 de abril fue cuando encontraron un cuerpo sin vida en los alrededores donde había desaparecido, y fue hasta el 22 de abril cuando confirmaron que se trataba del cuerpo de la joven.

Este suceso claramente no es un hecho aislado, ya que en promedio en México son asesinadas 10 mujeres al día, por lo que nuestro país ocupa uno de los primeros lugares en víctimas de feminicidio a nivel internacional, lo que es preocupante para toda la sociedad, ya que podríamos conocer a la siguiente víctima de este tan atroz e inhumano acto.

En los últimos días los medios de comunicación y las redes sociales han estado llenos de información sobre el caso de Debanhi, desde boletines de búsqueda hasta llamados al gobierno federal para el esclarecimiento de los hechos, ya que la fiscalía del estado de Nuevo León ha mostrado información con muchas inconsistencias, al grado de que el lugar donde fue encontrado el cuerpo de la joven, había sido revisado en múltiples ocasiones sin encontrar rastro de nada, pero casualmente en la última inspección localizaron el cuerpo.

Todas las inconsistencias que envuelven este caso solo están ocasionando que la gente tenga aún más desconfianza en los órganos de gobierno competentes para conocer sobre este tipo de hecho delictivos, ya que hacen pensar que la fiscalía está coludida de alguna forma con los criminales, ya que incluso la familia de la víctima realizó una segunda autopsia al cuerpo, y esta arrojó un resultado diferente a los mencionados por la fiscalía, por lo que me pregunto ¿Podemos confiar plenamente en estas autoridades?

He seguido este caso de cerca y puedo decir que hoy me encuentro decepcionada de las autoridades, pero en especial de la sociedad, ya que todos hemos contribuido de alguna manera para que este tipo de actos sigan consumándose en nuestro país, ya que acciones como no educar adecuadamente a nuestros hijos o permitir que amigos o conocidos tengan conductas inapropiadas, hacen que muchas personas piensen que está bien actuar de esa manera, desencadenando conductas aún peores en el futuro, por lo que deberíamos de empezar a cambiar como sociedad para que todas las mujeres que estamos en México puedan sentirse seguras.

El fin de semana vi algunas entrevistas que le hicieron a la familia de Debanhi, en especial a su padre, y ver esto me destrozaron el corazón, ya que soy madre de una niña y el sentimiento que me causa el solo pensar en que le podría sucederle algo así es algo que con palabras no se puede transmitir, pero que me alimenta para luchar por un mejor futuro para ella y para todas las mujeres, para que en el futuro puedan salir a las calles y sentirse seguras de que la sociedad la cuida y que el gobierno también.