El domingo 5 de junio del 2022 será recordado como un día histórico en Aguascalientes, nuestro Estado por primera vez en su historia será gobernado por una mujer, ese día como ciudadanas y ciudadanos tenemos la tarea de elegir a la mejor opción para encabezar el proyecto que durará 6 años.
Hemos escuchado frases como la de “el pueblo pone y el pueblo quita” y esto será una realidad el fin de semana, porque tenemos la posibilidad de decidir si queremos que nos siga gobernando la corrupción en Aguascalientes o decidimos elegir una opción distinta que venga a transformar el Estado.
Las y los invito a que reflexionemos nuestro voto, para que los tiempos venideros sean mejores que los actuales, en donde dialoguemos y tratemos de ver todo lo que nos rodea con otra perspectiva, para que podamos construir un mejor futuro, lleno de esperanza y bienestar para todas y todos, así logremos cosechar algo en conjunto, para construir el Aguascalientes que todos queremos.
Este domingo espero un ambiente democrático y que gane la elección la mujer que creamos que encabeza el mejor proyecto para llevar a nuestro Estado al siguiente nivel. No dejemos que el miedo nos invada y como se los he dicho anteriormente, este sentimiento no es malo para mí, sino todo lo contrario, hagamos que esa sensación solamente sea la fuerza de donde nos debemos agarrar para defender nuestro voto, defender a nuestro Estado del secuestro en el que lo han mantenido por tantos años.
Esta elección nos está dando la opción de seguir como estamos, con un servicio de agua y alcantarilla deficiente, calles por las que no se pude transitar como peatón o como automovilista, sentirnos inseguros por la delincuencia, incluso en nuestros hogares a causa de la de la inseguridad, o podemos elegir una opción distinta, una que sí nos represente a todas y todos, una que sirva al pueblo y no que se sirva de él, una que busque el bienestar para toda la gente.
Este domingo debemos de salir a ejercer nuestro voto como uno solo, como un gran ejército pacífico que busque la transformación de Aguascalientes a través de nuestro voto en un ejercicio democrático en el que cada sufragio vale exactamente lo mismo, que tiene cada uno la enorme importancia de ser la balanza que defina nuestro destino por el proyecto gubernamental que decidiremos.
Nuestro voto se convierte en un coro colectivo que nos permite saber el rostro que queremos darle a nuestro estado, la personalidad y la forma que tendrá ese ente en conjunto que será el Aguascalientes acorde al proyecto que decidamos, pero no olvidemos que es solamente el primer paso en esta nueva manera de practicar nuestra democracia.
Me refiero a que, durante la jornada electoral debemos conducirnos con una profunda ética cívica de observar y procurar que la contienda se desarrolle con limpieza y sin trampas, que quienes organizan la votación, quienes participan apoyando a las diferentes candidatas y los muchos votantes que saldremos a sufragar lo hagamos en paz y sin hacer trampas. Las y los invito en ese sentido a ser observantes de los acontecimientos de ese día y que si ven algo extraño o ilegal lo denuncien de inmediato.
Añado que una vez presentado el resultado, de darse de manera limpia y sin irregularidades, participemos de manera activa como ciudadanas y ciudadanos con nuestra opinión y organizándonos en nuestra comunidad para pedir a la ganadora que avance en el proyecto prometido y en aportar cada una de las personas en nuestra vida cotidiana no solamente en opinión, sino también y sobre todo en acciones en lograr un Aguascalientes diferente.
Si todos y cada uno de nosotros participamos en esta elección y después de ella, empezaremos a construir las bases de una colectividad participativa e impulsar con ello otras herramientas como la consulta popular en nuestro estado ejerciendo también la democracia participativa.
Sin embargo, el primer paso de este cambio individual y colectivo de conducta lo debemos realizar este domingo para cumplir con nuestro derecho y obligación cívica de ejercer nuestro voto de manera libre y consciente. El primer paso para tener un Aguascalientes distinto está al introducir nuestra boleta en la urna y a esa importante cita con la Historia no debemos de faltar. Es por nosotros y por nuestras futuras generaciones.
No permitamos que nadie apague la luz de la esperanza.