El pasado diez de marzo retomamos labores en el Honorable Congreso del Estado de Aguascalientes, me da gusto y me llena de energía pasar del “periodo de receso”, para regresar al pleno, en donde nos tenemos que concentrar en seguir avanzando la agenda legislativa, beneficiando primero a los que menos tienen, porque desde nuestra curul en el Congreso tenemos que luchar por el bienestar de todas y todos los hidrocálidos, para que podamos continuar con la transformación de Aguascalientes.
El jueves pasado estuvo lleno temas importantes, como la selección de las y los nuevos integrantes del Consejo Consultivo de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Aguascalientes, y de todos los aspirantes resultaron electos María Isabel Martínez Mercado, Silvia Solís Luévano, Thelma Ocampo Fuentes, Ana Cristian Dávila Peña y Manuel Alejandro Gutiérrez Flores. Estas personas ocuparán su cargo durante un periodo de cuatro años, y serán los encargados de tomar las decisiones más importantes dentro de la Comisión, por lo que les deseo éxito y que se conduzcan como ciudadanos honorables, velando siempre por el interés del pueblo bueno de Aguascalientes.
En el marco del 8m, en conjunto con mis compañeras diputadas presentamos y me adherí a algunas iniciativas, por ejemplo, una que propone un permiso de paternidad de siete semanas de duración por nacimiento o adopción de una hija o un hijo, esto tiene que ver con la paternidad activa responsable, porque nuestras hijas o hijos tienen que entender que tanto papá como mamá tienen las mismas tareas dentro de la casa.
Pienso que otorgarle este periodo de tiempo al padre del infante permitirá crear lazos más fuertes, y que las tareas como papás puedan ser realizadas por ambas partes, ayudando a eliminar la creencia de que la madre es la encargada de las tareas del hogar, ya que justo esos pensamientos machistas son los que no nos permiten avanzar con el movimiento.
En el mismo sentido presentamos una iniciativa que abonara de lleno al lenguaje incluyente, no sexista y con perspectiva de género a todo el trabajo legislativo en el estado de Aguascalientes, ya que a partir de su aprobación las iniciativas presentadas, los puntos de acuerdo, los dictámenes y las leyes emitidas, tendrán que cumplir con estos principios, por lo que es el comienzo de una nueva etapa de pensamiento en nuestro estado, ya tenemos que entender el poder que el lenguaje nos puede dar a las mujeres, ya que nuestro trabajo como legisladoras queda grabado en la historia con letras, así que a partir de este momento estos hechos quedarán registrados con una nueva corriente de pensamiento.
Por este medio reafirmo mi compromiso con la ciudadanía, en especial con los que menos tienen, porque como lo he dicho antes, siempre velaré por los intereses de las y los aguascalentenses, e invito a mis compañeros a olvidar los colores dentro del trabajo legislativo, a olvidar los intereses particulares, para que juntos podamos impulsar una agenda legislativa que le dé bienestar a toda la población.
